A fuego lento
En muchas ocasiones escuchamos términos y expresiones comunes, pero que en realidad desconocemos exactamente qué significan. Cuando leemos una receta en muchas ocasiones nos dice a fuego lento, y no siempre sabemos a qué se refiere.
Si somos cocineros inexpertos porque estamos cocinando nuestras primeras recetas, o estamos estrenando horno, hornilla o placa de inducción o vitrocerámica y desconocemos como funcionan exactamente, el término a fuego lento se convierte en una incógnita.
Por mero sentido común, todos nos imaginamos que fuego lento lleva implícito una temperatura no especialmente alta. Pero ¿cuál es esta temperatura? ¿He de poner la vitro al número 5 o al 3? ¿Y el horno? Aunque parezca increíble y técnicamente no pueda ser así, lo cierto es que los electrodomésticos son temperamentales y no es lo mismo el número 5 en una placa que en otra. Y ¿cómo saber que es fuego lento?
No queda otra que conocer la temperatura. A fuego lento significa calentar un líquido a 85º C, o incluso una temperatura menor, y cocer alimentos a esta
temperatura. Si empleamos un horno, fuego lento lo alcanzaremos entre los 150º C y los 180º C.
La practica y la experiencia nos llevará a saber de modo instintivo cual es el punto de nuestros electrodomésticos para programarlos en el punto justo que queremos. Y mientras llegamos a ese punto, podemos ayudarnos de un termómetro para cocina, que nos facilitará mucho el cocinado.
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